VIDAS  PARALELAS  A  DISTANCIAS SIDERALES

Enero/ 2022

Hace 10 meses, en medio del encierro pandémico, vi un episodio de This is Us que me voló la cabeza. El episodio contaba la vida de un desconocido Ingeniero Electrónico que en 1974 descubrió el algoritmo que permite al mundo entero poder generar video llamadas y enviarse fotos y videos por internet, Nasir Ahmed. Conocemos a todos los genios dueños de las millonarias empresas de tecnología, pero sin Nasir no hubiera existido ni Zoom ni Facetime ni el mismo JPG.

Cuando quise conocer más sobre él, me di cuenta que no había ningún video en internet del hombre que invento la videollamada y la transmisión de fotos y videos por internet. Raro no? Nada. Pero si supe que su adorable mujer, Queli, era tucumana. Fue ahí cuando tuve el presentimiento que Nasir y Queli estaban, quizás, en Argentina. Luego de decenas de llamados, decidí viajar a Yerba Buena y tuve el enorme placer de poder entrevistar a Nasir Ahmed y Queli en su living. Ellos estaban encerrados, como las miles de millones de personas que usaron durante la pandemia el algoritmo que Nasir creo.

¿Cómo agradecer tanto?

Este video es la primera grabación de Nasir Ahmed contando como descubrió el algoritmo que transformo el mundo.

Fue muy emocionante hacerlo, y conocer a estos dos seres tan especiales.

Gracias Nasir Ahmed. Gracias Queli Parente.

Y gracias a todos los que me ayudaron en esta locura.https://www.youtube.com/watch?v=nNmREQIF4Ik

El sábado (08/01) al mediodía recibí este mensaje por Whatsapp y pensé:

  • ¿Para qué me manda esto?
  • Es interesante, pero ¿Por qué se molestó en enviármelo?
  • ¿Se habrá equivocado de destinatario?
  • ¿Supuso que me resonaría de algún modo?

Mi esposa sirvió la comida y a almorzar que hoy es sábado, mi día de vincularme con mis amigos enfermos y no para pensar en que habrá llevado a esta persona a enviarme esto.

Terminé de almorzar, lavé los platos, calenté un par de pocillos de café, uno le llevé a mi esposa y comencé a escribir a mis amigos que no la están pasando nada bien y a dormir la siesta.

Al finalizar la 1° parte de mi ronda, cuando me disponía a apagar la PC algo me paralizó, una fuerza extraña no separaba mis manos del teclado, era la señal, debía dar forma a mis desordenados pensamientos y vincularlos con lo que había recibido.

Entonces recordé que hace muchos años, como 40, la computación no era ni remotamente lo que es hoy y para hacer algo había que programar, decirle a la computadora en el idioma que ella entendiera lo que yo quería, sin olvidarme ninguna instrucción ya que máquinas, al menos en ese tiempo, hacían lo que uno le decía y no lo que piensa que le dijo.

Fue así que armé un programa para la Dosificación Racional de Hormigones, o sea para determinar la cantidad de cada componente para diferentes casos y se lo mostré a un compañero que publicaba este tipo de programas en la Revista de mayor circulación en Argentina en temas de Construcción.

Cuando me lo devolvió me dijo que estaba muy bien, que funcionaba, que si quería él lo hacía publicar, quedé atónito y le pregunté: ¿Y yo? Sin ponerse colorado me dijo: te puedo mencionar como que colaboraste en la revisión de los originales y le dije que no, por suerte no me copió el trabajo y nunca fue publicado.


Distancias Siderales
Distancias Siderales

Cuando me lo devolvió me dijo que estaba muy bien, que funcionaba, que si quería él lo hacía publicar, quedé atónito y le pregunté: ¿Y yo? Sin ponerse colorado me dijo: te puedo mencionar como que colaboraste en la revisión de los originales y le dije que no, por suerte no me copió el trabajo y nunca fue publicado.

A este hombre le pasó distinto, su descubrimiento luego de ser rechazado fue aprobado en otro sitio y hoy todos gozamos del producido de su talento.

Listo, ya cumplí, con esto es suficiente, así me resonó, tengo otro caso que terminó distinto pero ya está bien, la cama me requiere.

Otra vez esa fuerza invisible, quizás el alma, la conciencia o la virtualidad sana (¿estará bien usado el término aquí?) me afirmaron a la silla y mi cabeza se puso otra vez movimiento.

Esto fue un recuerdo, no califica para resonancia, ¿Qué tiene que ver con la MULTI?

Pues joder, si a mí me paso lo mismo con la MULTI, me invitaron a ir y fui de compromiso, una parte de mi me dijo ya está, esto no es para vos, como le dijeron a Nasir, esto es muy básico.

Insistí y volví y otra vez, esa fui acompañado por ni pequeña hija y al salir le dije no vuelvo más, que tengo que hacer yo aquí.

Mi sabio terapeuta, respetuoso de mis tiempos, de mis angustias, de mis preocupaciones no me dejó, caer seguramente como Queli Parente con Nasir, y un día volví, pero está vez dejé el pony amarrado en el palenque de mis sentimientos más infantiles y prejuiciosos y llegué caminando hasta la Notebook para iniciar el largo recorrido del Zoom.

Y vi las caras de frente, sentí que las miradas se cruzaban con las mías, no como antes en el Méndez donde a la mayoría los veía distantes, de atrás y que a la entrada se agrupaban y yo me quedaba solo porque no conocía a nadie.

La virtualidad me dio la cercanía que me faltaba, como el consejo del publícalo ya mismo que recibió Nasir y lo seguí trabajando como Nasir y llegaba tarde a cenar los miércoles como Nasir y hoy mientras hablaba con una amiga, ex compañera de la primaria que tiene cáncer y que sufre porque su hija tiene ataques de llanto, su hijo ataques de pánico y yo invitándola a la MULTI y cuando me dijo: Sucede que estamos todos mal, le contesté entonces que vengan todos, para eso es la Multifamiliar y algunas otras cosas, me terminó diciendo como en aquella vieja propaganda de nuestra infancia: Sos un león vendiendo MULTIS, después me cambió de tema y no quise seguir, por hoy ya había sido bastante, mañana más.

Con Nasir llevamos vidas y experiencias paralelas, a distancia infinita, pero ambos nos hemos esforzado, ambos recibimos varios no y nos sobrepusimos, ambos perduramos en el esfuerzo a pesar de llegar tarde a la cena, ambos intentamos hacer algo por los demás sin importarnos el premio material ni el prestigio social, para él era suficiente dejar algo trascendente para la humanidad, para mi es importante vencer mis miedos, mis angustias, mis adolores para que quienes me rodean, mi metro cuadrado de antes, mi trama de hoy, vivan lo mejor que puedan, abarrotados de conceptos morales y éticos, aunque viajemos en colectivo y veraneemos en la terraza.

Para suscripciones: resonancias.personales@gmail.com
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